Donald Trump regresa a la Casa Blanca: ¿Cómo impactará su gobierno en las inversiones de venture capital en México?

Analizamos los posibles escenarios que pueden generarse en la industria del capital de riesgo con el triunfo de Trump, el rumbo que pueden tomar las inversiones y las startups que se beneficiarían.

Autor: Salvador Neme

El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca en 2025 como presidente de los Estados Unidos, tendrá un impacto significativo en el ecosistema de capital de riesgo o venture capital (VC) en México, generando desafíos y oportunidades moldeadas por el T-MEC, el fortalecimiento de los lazos económicos y la tendencia del nearshoring.

Sectores clave como manufactura, logística, fintech y agtech podrían beneficiarse y tomar mayor impulso por las necesidades cambiantes del mercado y los ajustes en las políticas que se tienen contemplados en el mandato de Trump. Sin embargo, las startups e inversionistas mexicanos tendrán que navegar en la incertidumbre y diversificar fuentes de financiamiento o mercados mientras México y Estados Unidos definen la nueva ruta que tomará su relación política y comercial.

Dinámicas cambiantes en la relación entre México y EU

Aunque todavía no se sabe con claridad el plan de acción de Trump, es importante analizar los diferentes escenarios que podrían surgir con las iniciativas que ha dejado ver hasta ahora, y cómo las decisiones que tome en el futuro pueden influir en el ecosistema de startups y venture capital.

• Sobre el T-MEC: Aunque el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) es un acuerdo bien establecido, Trump ha dicho que planea modificarlo. Sin embargo, es poco probable que sea alterado agresivamente ya que afectaría la relación comercial que existe, considerando que México es el principal socio comercial de Estados Unidos, superando a China y Canadá. El T-MEC es un marco sobre el cual se pueden construir las futuras relaciones comerciales.
• Interdependencia económica: Estados Unidos y México están estrechamente ligados económicamente, con México actualmente como el principal socio comercial de Estados Unidos. Esta interdependencia podría suavizar algunas de las políticas más agresivas de Trump.
• Tendencia de nearshoring: Las disrupciones en las cadenas de suministro globales han acelerado la tendencia del “nearshoring” en México. Muchas empresas de diferentes partes del mundo están buscando trasladar su producción más cerca de Estados Unidos. México tiene mucho que ganar de este cambio: Podría atraer más inversión directa extranjera directa, especialmente debido a la creciente dinámica competitiva de Estados Unidos con China.

El camino por delante

A medida que el ecosistema de capital de riesgo en México se ajuste a las implicaciones de la presidencia de Trump, es probable que surjan varios escenarios. Veamos algunos de los más importantes.

1. Incertidumbre entre inversionistas: La volatilidad inicial del mercado y la incertidumbre política podrían generar una desaceleración temporal en la actividad de los venture capital, ya que los inversionistas adoptan un enfoque de “esperar y ver”.

2. Enfoque de mercado: Con la posible aparición de barreras comerciales para México en el marco del T-MEC, las startups podrían verse en la necesidad de expandirse hacia otros mercados del continente americano. Incluso podrían centrarse en crear modelos de negocio más completos, con múltiples fuentes de ingresos y suministros, así como mercados que no dependan completamente del mercado estadounidense.

3. Políticas migratorias: Las políticas migratorias de Estados Unidos podrían impulsar el flujo de talento hacia México. Muchos trabajadores calificados y emprendedores tendrían que regresar a este país, y con esto, el ecosistema local de startups puede fortalecerse en el territorio mexicano.

4. Colaboración transfronteriza: A pesar de la incertidumbre en los niveles gubernamentales, podría darse una creciente cooperación económica, especialmente entre empresas de Estados Unidos y México, a través del intercambio tecnológico y el acceso a diferentes mercados.

5. Potencial como hub regional: Gracias a su ubicación privilegiada y un mercado interno considerable, México está bien posicionado para convertirse en la capital de startups para emprendedores e inversionistas de América Latina.

6. Fuentes de financiamiento: Las startups mexicanas podrían diversificar sus fuentes de financiamiento, mirando más allá de los capitales de riesgo basados en Estados Unidos intentando atraer inversores nacionales, europeos o asiáticos.

7. Iniciativas gubernamentales: Bajo el liderazgo de Claudia Sheinbaum, la administración mexicana podría formular nuevas políticas para fomentar el crecimiento del ecosistema de startups y atraer inversión extranjera. Esto incluiría nuevas estrategias como incentivos fiscales, cambios en las regulaciones empresariales y, lo más importante, un mayor presupuesto destinado a la innovación.

Oportunidades para las startups y venture capital

Aún con la incertidumbre que existe, hay cuatro sectores que podrían beneficiarse impulsando el desarrollo de las startups y la atracción de inversión. Estos son los siguientes:

1. Manufactura y logística: El apoyo de Trump a la revitalización de la manufactura estadounidense podría tener efectos positivos sobre la industria mexicana, que ya es fuerte en este ámbito. Esta tendencia podría abrir la puerta a más startups que desarrollen tecnologías innovadoras para apoyar y aprovechar el comercio en México y Latinoamérica.

2. Fintech: La incertidumbre económica probablemente desencadene cambios en las divisas y en la forma en que se envían las remesas. Esto ha generado que las empresas fintech mexicanas estén cada vez más interesadas en desarrollar soluciones para pagos transfronterizos, banca en línea y herramientas para la inclusión financiera.

3. Agtech: Debido a las políticas agrícolas de Trump y las posibles tensiones en las relaciones comerciales, existen oportunidades para las startups mexicanas de agtech que ofrezcan soluciones para hacerle frente a la inseguridad alimentaria, la agricultura sostenible y los productos agrícolas.

4. E-commerce y última milla: Al incrementar el intercambio de mercancías, podría darse un incremento en el crecimiento de empresas de comercio electrónico y entregas en la última milla a medida que cambien los patrones de comercio y consumo.

Como verás, de cara al futuro y en el mejor de los casos, podemos esperar mayor apoyo gubernamental para las startups mexicanas, mejora de la colaboración empresarial transfronteriza, enfoque en la construcción de modelos de negocio resilientes, la consolidación de México como hub regional de startups y un crecimiento acelerado en startups de e-commerce, logística, pagos digitales y de manufactura.

La capacidad del ecosistema de venture capital mexicano para adaptarse a estos cambios será crucial. Aprovechando sus fortalezas y capitalizando las oportunidades emergentes, el ecosistema puede salir fortalecido y ser más competitivo a nivel global, a pesar de los desafíos que suponen las cambiantes relaciones entre Estados Unidos y México.